El servicio de bomberos en el Reino Unido opera bajo acuerdos legislativos y administrativos independientes en Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia y Gales. Los servicios de bomberos han sufrido cambios significativos desde comienzos del siglo XXI, un proceso propulsado por la devolución de los poderes del gobierno central, nueva legislación y un cambio en los procedimientos operacionales en vistas de los ataques y amenazas terroristas. El catalizador del cambio llegó con la publicación en 2002 de una investigación del servicio de bomberos en el Reino Unido por el Profesor Sir George Bain. Su informe, el Investigación Independiente del Servicio de Bomberos, dio paso a rápidos cambios en los servicios de bomberos y rescate. Los términos de referencia de Bain eran descritos de tal forma: Considerando el papel cambiante y en desarrollo del Servicio de Bomberos en el Reino Unido, para indagar sobre ello y hacer recomendaciones en la futura organización y dirección del Servicio de Bomberos...[1] En el prólogo al artículo, Bain afirmaba que se llevaba a cabo independiente y objetivamente: ...la investigación se juntó con la cooperación del Gobierno, las organizaciones de los patrones y las autoridades de bomberos en Inglaterra y Gales, Escocia e Irlanda del Norte."[2]