Las acciones armadas de la izquierda en Chile incluyen diversos actos cometidos en Chile a partir de los años 1960 por distintos grupos de izquierda, que justificaban la utilización de acciones armadas como mecanismo legítimo para la acción, lucha, protesta, represalias[1] o resistencia política. Esto podía darse tanto para situaciones particulares-concretas (asalto a un banco con fines de financiamiento o ajusticiamiento de alguna autoridad específica), como para contextos de carácter más general (rebelión contra la dictadura y sus principales artífices).[cita requerida]
La mayor parte de las acciones armadas, realizadas por grupos revolucionarios, se dieron bajo el período de la dictadura militar y primeros años de la transición política hacia la democracia, en particular entre la década de 1980 y el año 1994, fecha en que la gran mayoría de estos grupos ve mermada la base social que les apoyaba y las estructuras internas de sus organizaciones, y a su vez, son reprimidos y perseguidos por los organismos de inteligencia de la época, lo que termina disolviendo a algunos de estos grupos, y otros, terminan abandonando la acción armada como forma de acción política.[2][3]
En Chile, los grupos de izquierda que comenzaron a incorporar algunas de estas prácticas políticas en su accionar, surgieron en los años 1960, en el contexto de radicalización que se vivió en la época de los llamados Tres tercios. El nivel de las acciones armadas en este período pueden ser catalogadas de baja intensidad, centradas solo en algunos espacios urbanos y con objetivos específicos y concretos. Entre las múltiples influencias y referencias internacionales que tuvieron estos incipientes grupos en Chile, estaba: la Revolución cubana, la resistencia vietnamita en la Guerra de Vietnam, los movimientos estudiantiles del Mayo francés de 1968 y el establecimiento de diversas guerrillas y gobiernos revolucionarios en América Latina. El principal grupo de este periodo fue el Movimiento de Izquierda Revolucionaria, el cual tuvo importantes influencias y similitudes con la estrategia llevada a cabo por el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros de Uruguay.
Después del golpe militar de 1973 contra el gobierno de la Unidad Popular, el uso político de la violencia adoptó otro carácter, transformándose en la resistencia contra la dictadura militar de Augusto Pinochet. Dentro de estas acciones destacan las realizadas por el Frente Patriótico Manuel Rodríguez, incluyendo el fallido atentado contra Pinochet en 1986.
Tras el fin de la dictadura militar y con el inicio de la transición a la democracia, las acciones armadas reivindicadas por organizaciones de izquierda se redujeron considerablemente a acciones de baja envergadura, aun así algunos actos de gran notoriedad pública durante este periodo fueron el asesinato del senador Jaime Guzmán y el secuestro de Cristián Edwards, ambas acciones adjudicadas al FPMR. Sin embargo, la mayoría de dichos grupos se disolverían a lo largo de la década de 1990.