Se denomina aire a la disolución de gases que constituye la atmósfera terrestre, que permanecen dentro del planeta Tierra por acción de la gravedad. El aire es esencial para la vida en el planeta y transparente a simple vista. La dispersión Rayleigh de la luz visible del Sol (blanca, porque se superponen las ondas de todas las longitudes de onda) a longitudes de onda del azul (10 000 Å) dota a la atmósfera de un color azulado.
Es una mezcla de gases en proporciones ligeramente variables, compuesto por 21% de oxígeno, 78% de nitrógeno, 0,89% de gases nobles, 0,1% de agua y pequeñas cantidades de otros gases. El aire también contiene una cantidad variable de vapor de agua, en promedio alrededor del 1 % al nivel del mar y del 0.4 % en toda la atmósfera.[1]