En las ciencias sociales, el término ambiente construido (built environment en inglés) se refiere a los espacios modificados por el ser humano que proporcionan el escenario para sus actividades diarias, que van en escala desde edificios y parques o áreas verdes, hasta vecindarios y ciudades. Suelen incluir infraestructuras de apoyo como los sistemas de agua potable, redes de energía eléctrica e infraestructuras de transporte. El ambiente construido es un material, producto espacial y cultural del trabajo humano que combina elementos físicos y de energía para vivir, trabajar y jugar. Se ha definido como “el espacio hecho por el hombre en el que las personas viven, trabajan y se recrean en el día a día”.[1] El “ambiente construido abarca lugares y espacios creados o modificados por la gente, como edificios, parques y sistemas de transporte”. En los últimos años, la investigación en salud pública ha ampliado la definición de "ambiente construido" para incluir el acceso a alimentos saludables, huertos urbanos, otorgándole prioridad al “peatón", y al “ciclista”,[2] razón que se incluye en el desarrollo sostenible en favor al crecimiento inteligente.