Ballets Russes de Monte-Carlo (Ballets Rusos de Montecarlo) fue una compañía de ballet con sede en la capital monegasca creada a la muerte de Serguéi Diáguilev en 1929 y tras la disolución de su legendaria compañía, los Ballets Rusos. Bajo la dirección de los empresarios René Blum y Coronel de Basil (Vasili Grigórievich Voskresenski) la nueva compañía se proponía mantener vivo el repertorio de los Ballets Rusos y continuar su tradición artística.[1] Para ello contaron con algunos de los más cercanos colaboradores de Diáguilev como Serge Grigóriev, su director de escena, Borís Kojnó, su libretista y sus coreógrafos George Balanchine y Léonide Massine. Entre los bailarines se unieron a la compañía veteranos de la época Diáguilev como Liubov Chernyshova (también maestra de ballet), Alexandra Danílova, Léon Voizikovsky, Felia Dubrovska, y nuevos elementos como las llamadas Baby Ballerinas Tamara Tumánova, Irina Barónova, Tatiana Riabouchinska, y los bailarines André Eglevsky, David Lichine y Paul Petroff.[2]