La Biodanza (neologismo del griego bios (vida) y del español-castellano danza, literalmente danza de la vida) se define como un sistema de desarrollo humano. Es una actividad que se desarrolla en sesiones grupales, en las que se proponen secuencias específicas de ejercicios encaminados a estimular cualidades humanas como la alegría de vivir, la energía vital, la sensibilidad ante la vida, la comunicación afectiva e íntima, el despertar del placer, la conexión a los instintos, la expresión creativa y emocional a través del cuerpo. Es una técnica que emplea la música, el canto, la danza no estereotipada y el trabajo no verbal en grupo con el objetivo de mejorar el estado físico, emocional y mental de quienes la practican.[1][2]
Se basa en parte en el principio biocéntrico, que pretende reivindicar el valor primordial de la vida.[3][4]
Algunos críticos han asociado a la Biodanza con la cultura New Age. Sin embargo, de acuerdo con los parámetros semánticos musicales adoptados por sus practicantes, no hay canciones New Age en el elenco musical original.
El CESNUR de Italia (Centro de Estudios sobre Nuevas Religiones) la ubica entre los llamados movimientos de potencial humano. En ese mismo país, la región de Lombardía con la Ley 2/2005[5] ha incluido la Biodanza entre las disciplinas bionaturales.[6] Por su parte la Organización Médica Colegial de España, en su "Observatorio OMC contra las Pseudociencias, Pseudoterapias, Intrusismo y Sectas Sanitarias", la sitúa en una lista de "terapias/técnicas no convencionales".