El canibalismo es el acto o la práctica de alimentarse de miembros de la propia especie. Este puede producirse entre varios miembros, aunque vulgarmente se asocia con la antropofagia, cuando seres humanos consumen a congéneres.
El término proviene de la deformación de la palabra caribe caniba o cariba, del idioma taíno, parcialidad de la etnia arawak.[1] Para la etnia caribe significaba «osado», «audaz»; para los arawak significaba «enemigo»; y para los europeos ha pasado a significar «comedor de carne humana».
Los caribes eran nativos de América que Cristóbal Colón encontró en la isla de La Española en su primer viaje. Practicaban la antropofagia, pues atacaban a los arawak para conseguir botín, y también capturaban a niños y los castraban.
Las historias que se cuentan sobre canibalismo deben tomarse con cierto escepticismo: por ejemplo, Cristóbal Colón regresó a Europa con reportes de canibalismo en el Caribe, siendo así que este razonamiento se utilizó para promover alianzas y levantamientos con las tribus esclavizadas y canibalizadas relevando en el dominio a las antiguas tribus y civilizaciones dominantes , sonriendo a servidumbre a alrededor de un millar y medio de los nativos antes antropófagos.[2][3]
Los casos particulares en sociedades contemporáneas se relacionan actualmente con situaciones de hambre, y con ciertos criminales con profundos problemas mentales.