La actividad sexual humana, práctica sexual humana o comportamiento sexual en los humanos se refiere a la manera en que los seres humanos experimentan y expresan su sexualidad. Las personas participan en una variedad de actos sexuales, que van desde actividades que se hacen en soledad (p. ej., la masturbación) hasta actividades que se hacen con otra persona (p. ej., el coito, el sexo sin penetración, el sexo oral, etc.) en patrones cambiantes de frecuencia y por una amplia variedad de motivos. La actividad sexual da como resultado usualmente la excitación sexual y cambios fisiológicos en la persona excitada, algunos de los cuales son más pronunciados mientras que otros son más sutiles. La actividad sexual puede incluir también conductas y acciones que tienen como objetivo aumentar el interés sexual por parte de otra persona o su frecuencia de actividad sexual, como en el uso de estrategias para encontrar o atraer parejas (comportamientos de cortejo y exhibición) o interacciones personales entre individuos (p. ej., el juego previo o el BDSM). Tras la excitación sexual puede seguir actividad sexual.
La actividad sexual humana tiene aspectos sociológicos, cognitivos, emocionales, conductuales y biológicos (p. ej., la formación de vínculos emocionales, compartir emociones, el interés sexual) y puede realizarse con el propósito de la reproducción biológica, trascendencia espiritual, para expresar afecto o por placer y entretenimiento (conocido en este contexto como "gratificación sexual"). El deseo por el sexo y el coito es una de las motivaciones del comportamiento humano. Todas las especies animales que tienen reproducción sexual, y todas las culturas humanas, tienen una serie de conductas que se dividen en: cortejo, intimidad y actividad sexual.[1]
En algunas culturas, la actividad sexual se considera aceptable solo dentro del matrimonio, y el sexo premarital y extramarital son tabú. Algunas actividades sexuales son ilegales bien universalmente o bien en algunos países o regiones (p. ej., la agresión sexual o la actividad sexual con una persona que no ha alcanzado la edad de consentimiento sexual), y otras son consideradas contrarias a las normas de ciertas sociedades o culturas (p. ej., el sexo homosexual).