Los elefantes de guerra fueron un arma importante, aunque no demasiado frecuente, en la historia militar de la Antigüedad. Eran utilizados normalmente para cargar contra el enemigo, para pisotear a grupos de enemigos o romper sus líneas. Se podían emplear tanto elefantes machos como hembras. Los machos son animales más grandes, pero a menudo por su agresividad y su nerviosismo, sobre todo en época de apareamiento, no eran fáciles de manejar.