Una esclusa[1] es una obra hidráulica utilizada para subir y bajar barcos y otras embarcaciones entre extensiones de agua de diferentes niveles en vías fluviales y canales. Permite salvar los desniveles existentes en canales navegables, facilitando el paso de los barcos, simplemente, haciendo aumentar o disminuir el nivel del agua dentro de la esclusa, por el principio de los vasos comunicantes. Sus compartimentos pueden formar parte de las estructuras complementarias de una presa, cuando esta se construye sobre ríos navegables.
La característica distintiva de una esclusa es una cámara fija en la que se puede variar el nivel del agua; mientras que en una esclusa de cajón, en un elevador de barcos o en un plano inclinado de un canal, es la propia cámara (normalmente entonces llamada cajón ) la que sube y baja.[2]
Las esclusas se emplean para hacer que un río sea más fácilmente navegable o para permitir que un canal atraviese terrenos que no están nivelados.[3] Los canales más modernos se sirven de esclusas grandes para permitir tomar una ruta más directa.