El feminismo separatista o separatismo feminista sostiene que se debe dar la separación de los hombres en ciertos ámbitos, para que las mujeres puedan tener espacios seguros.[3][4] Debido a que gran parte de su teorización se basa en el feminismo lésbico, el separatismo feminista es a menudo considerado simplemente un separatismo lésbico, pero muchos aspectos del movimiento feminista utilizan y han sido influenciados por el separatismo feminista general.[3] Las feministas separatistas creen que las mujeres tienen derecho a espacios segregados por sexo (en refugios, casas de acogida, baños).[5] Estos espacios seguros no se refieren exclusivamente a los varones, ya que el impacto de la inclusión de las mujeres trans en los espacios solo para mujeres genera malestar y temor en muchas mujeres, incluyendo el temor a ser abusadas sexualmente.[6][7]
La autora Marilyn Frye describe el separatismo feminista como la «separación de varios tipos o modos de los hombres y de las instituciones, relaciones, roles y actividades definidas por los hombres, dominadas por los hombres y que operan en beneficio de los hombres y el mantenimiento del privilegio masculino. Esta separación es iniciada o mantenida por mujeres.[8]
↑Marilyn Frye. «Some Reflections on Separatism and Power». En Meyers, Diana T. (Ed.) (1997), Feminist Social Thought: A Reader. New York: Routledge. pp. 406–414.