Un fiordo es una estrecha entrada costera de mar formada por la inundación de un valle excavado o parcialmente tallado por acción de glaciares.[1][2] El agua al congelarse crea fracturas, formando un valle sumergido que presenta forma de U aunque la parte inferior no es visible, ya que está bajo el nivel del mar.[1][3]
Los fiordos destacan por sus grandes profundidades con una construcción más superficial llamada "sill", que es generalmente un lecho rocoso expuesto. Algunos de los más profundos son el fiordo canal Messier, con 1270 m de profundidad en Chile y el fiordo de Sogn, de 1308 m de profundidad en Noruega.[1] El fiordo Scoresby Sund, en Groenlandia, llega hasta los 1500 m de profundidad.[4] Las partes más profundas de los fiordos suelen ser las más adentradas en la costa mientras que la boca de los fiordos suele ser poco profunda.[1][5] El ya mencionado fiordo de Sogne tiene, por ejemplo, una profundidad de tan solo 150-200 m en su boca.[5]
Debido a que los fiordos se ubican en áreas antiguamente cubiertas por glaciares, ello determina que solo aparezcan en regiones de alta latitud, a partir de la latitud 50 en el hemisferio norte y a partir de la latitud 40 en el hemisferio sur.[6] En concordancia con esto, presentan fiordos, por ejemplo, las costas de Noruega, Islandia, Groenlandia, Escocia, Nueva Zelanda; Alaska, en Estados Unidos; Columbia Británica en Canadá; Islas Kerguelen; Patagonia chilena; la Isla de los Estados y la zona inmediata a la Bahía Lapataia en Argentina; algunas islas del Ártico, y en La Antártida (especialmente en la Península Antártica).[5][7][8][9] Se calcula que la costa noruega tiene 29 000 km de longitud con sus casi 1200 fiordos, pero sólo 2500 km si se excluyen los fiordos.[10][11]