Una khata(g), hada, katak o khadag (en mongol: [xɑtk]) es una bufanda tradicional ceremonial común en la cultura tibetana donde fue adoptada por el budismo tántrico y junto con este se introdujo también en Mongolia, Nepal y Bután.
La bufanda simboliza la pureza y la compasión y por lo general estaba confeccionada de seda, aunque desde finales del siglo XX son más comunes de algodón y tejidos sintéticos. Las khatas tibetanas son generalmente de color blanco simbolizando la pureza del corazón del que la ofrenda,[1][2] también son bastantes comunes las khatas de color oro. Las khatas mongolas son generalmente de color azul, que simboliza el cielo.
Las khatas pueden ser obsequiadas junto con incienso y otros artículos religiosos en bodas, funerales, nacimientos, graduaciones, llegadas y salidas de invitados y huéspedes. Al ofrecerla los tibetanos suelen darla junto con la expresión Tashi Delek («buena suerte»).
En Mongolia, las khatas a menudo están atadas a ovoos, estupas o árboles especiales y rocas.