La ley seca, también conocida como prohibición (en inglés, prohibition), es una medida que han aplicado ciertos Estados durante la historia, consistente en la ilegalización de la fabricación, transporte, importación, exportación y la venta de alcohol para consumo.
La ley seca, al prohibir el alcohol y no dar respuesta a la demanda existente, puede favorecer la generación de mercados negros y dinero negro, que consiguen el licor en otros lugares donde se produce, lo introducen ilegalmente y lo venden para satisfacer tal necesidad a un precio más elevado, debido a que la demanda para consumir alcohol sigue siendo más alta que la oferta.