Multilateralismo es un término usado en relaciones internacionales para referirse a la actividad conjunta de varios países sobre una cuestión determinada.[1][2]
Organizaciones internacionales, tales como la OMS y la ONU, son multilaterales por su naturaleza. Los proponentes principales del multilateralismo han sido históricamente poderes intermedios, como Australia, Canadá, Japón, Suiza, los países nórdicos, Argentina, Brasil y la UE. Los países más poderosos típicamente actúan de manera unilateral, mientras que los países más pequeños tienen poco poder directo en las relaciones internacionales aparte de su participación en la ONU.[1]
El multilateralismo puede involucrar a varios países actuando juntos o involucrar a alianzas regionales.[1]