El Reino de Sajonia (en alemán: Königreich Sachsen), que existió entre 1806 y 1918, fue un miembro independiente de la Confederación del Rin, la Confederación Germánica, la Confederación Alemana del Norte y, por último, uno de los 25 estados del Imperio alemán. Tenía una superficie de 14 993 km² y su población era de 2 556 244 habitantes en 1871 y de 4 202 216 en 1900. Su capital era Dresde, llamada la «Florencia del Elba» (546 800 habitantes en 1910, 515 000 en 1905).
Su forma de gobierno era la monarquía constitucional hereditaria, con dos cámaras que se reunían cada dos años. La segunda cámara contaba con 82 diputados. El reino de Sajonia tenía cuatro portavoces en el Consejo Federal. Su Constitución databa del 4 de septiembre de 1831, modificada posteriormente el 20 de abril de 1892. El Reino de Sajonia se adhirió a la Confederación Alemana del Norte el 21 de octubre de 1866 y formó parte del Imperio alemán. Desaparecería como Estado en 1918 a consecuencia del Tratado de Versalles, cuando su territorio pasó a formar parte de la República de Weimar.