La violencia es un tipo de interacción entre individuos o grupos, presente en el reino animal, por medio de la cual un animal o grupo de animales, intencionalmente causa daño o impone una situación, a otro u otros animales.[1][2][3]
En las sociedades humanas organizadas estatalmente, la violencia se caracteriza por la intervención del Estado como institución monopolizadora de la violencia y se manifiesta como modalidad de una serie de conflictos sociales muy variados,[4][5] de signo diverso, como la guerra, el genocidio, el crimen, el terrorismo de Estado, el terrorismo, la legítima defensa, la violencia de género, la violencia intrafamiliar, el maltrato infantil, resistencia a la opresión, la esclavitud, las cárceles, los duelos y riñas, algunos deportes y artes marciales, la crueldad hacia los animales, etc.[6][7][8]
Desde la perspectiva de la salud humana, la OMS define la violencia como:
El uso intencional de la fuerza física, amenazas contra uno mismo, otra persona, un grupo o una comunidad que tiene como consecuencia o es muy probable que tenga como consecuencia un traumatismo, daños psicológicos, problemas de desarrollo o la muerte.Organización Mundial de la Salud[9]
Puede producirse a través de acciones y lenguajes, pero también de silencios e inacciones, y es valorada negativamente por la ética, la moral y el derecho, aún en casos en los que pueda considerarse legítima. La violencia puede ser de carácter ofensivo o defensivo (también se utilizan los conceptos de violencia proactiva y violencia reactiva), habilitando en este último caso figuras de justificación ética de la violencia, como la legítima defensa y el derecho de resistencia contra la opresión.[10][11]
|alo=
ignorado (ayuda)
|nombre-traductor=
ignorado (ayuda); Parámetro desconocido |apellido-traductor=
ignorado (ayuda)